y en lo alto, la casa de la familia de Hugo desde donde divisas le Luberon. deseosos estamos de volver a pasear por el bosque de cedros con los olores que sus plantas nos ofrecen, con los ruidos de las cigarras, con los colores de esta época. Si el tiempo ha sido generosamente bueno nos esperan los cerezos en flor, esos ramos de flores de donde luego saldrán las deliciosas cerezas que saben poner en licor como nadie. ese cielo azul que choca contra el suelo con los verdes de las vides, de los olivos, de la planta de la lavanda...
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..Fuen...que bonitas fotos de Provenza...que ilusión volver pronto...¡¡¡¡ Un abrazo Berta
ResponderEliminarEstoy salivando...los jubilados jugando a la petanca, las terracitas al sol con copas de pastis, el olor a tapenade y a pan caliente. La cadencia tranquila de los días, la amabilidad de la gente. Los mercados llenos de flores y de color...
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